miércoles, 4 de mayo de 2016

Ciudad y campo. La polis y su manifestación material. El urbanismo.

La polis surge Cuando un conjunto de ciudadanos se consideran relacionados entre sí por un vínculo común que les define como miembros de un mismo círculo. Los ciudadanosdeben sacrificar algo de su propia libertad en beneficio de un fin común. Como consecuencia de ello lo que deben de aceptar los ciudadanos es una forma de gobierno, unas normas, que en un principio no van a estar puestas por escrito, y un marco territorial.



         Las características de la polis.
Se trata de una comunidad soberana y autónoma caracterizada por tener un carácter agrario y dotado de un lugar central. Así es necesaria la existencia de una ciudad y de un territorio para que podamos hablar de polis. La polis va a surgir al servicio de unos intereses determinados, siendo estos normalmente económicos. En los primeros momentos, en la etapa geométrica, los beneficiarios de esos intereses económicos van a ser los aristoi (los mejores). Con el paso del tiempo otros grupos sociales van a poder conseguir beneficios semejantes.
La polis es además restrictiva ya que hay determinados individuos que contaran para la polis solo como individuos sujetos a obligaciones de tipo fiscal y militar. Así vemos como La ciudad es el conjunto de ciudadanos cohesionados por nexos de índole jurídica e ideológica decididos a explotar un determinado territorio que tienen como propio. 
La ciudad es un organismo de enorme complejidad social, económica, organizativa y política.  La polis implica la existencia de un centro, así como es en la ciudad donde residen los órganos de gobierno. Es también un centro social y administrativo y religioso. Desde ella se dirigen el conjunto de los territorios. Esa ciudad recibe la mayor parte de los recursos de la comunidad y esos recursos se van a utilizar para dotarla de todos los equipamientos necesarios para cumplir su función. La ciudad tiene que contar con un ágora que teóricamente tiene que estar situada en el centro de la ciudad. En un primer momento van a ser un lugar de mercado, y posteriormente lugar de reunión de la asamblea, lugar de deliberaciones y comunicación entre gobernantes y gobernados. El ágora también va a ser un lugar de paseo y un lugar en donde presenciar espectáculos públicos. En el caso por ejemplo de Atenas sabemos que las representaciones teatrales se realizaban en ese espacio construyendo andamiajes provisionales de madera. Va a ser así un lugar de encuentro de la ciudadanía y unos lugares sagrados, siendo el alma de la ciudad. Allí se van a encontrar las señas de identidad de la polis, siendo estas los dioses comunes, los héroes epónimos (a los que se vincula la fundación de la ciudad) y las leyes escritas.
En el siglo VIII a.C se documento la ciudad de Smirna, siendo la primera ágora documentada.  En las ciudades ex novo siempre se va a dejar un espacio reservado para la construcción del ágora. En las ciudades viejas poco a poco se irá despejando lugares previamente ocupados por las habitaciones para dejar espacio al ágora. Otro de los requisitos de una ciudad es la existencia de un santuario dedicado a la divinidad titular. El emplazamiento habitual va a ser las acrópolis. En época micénica fueron sede de los gobernantes y posteriormente, en época oscura, la acrópolis va a ser un lugar deshabitado que recordará a quienes vivían en el entorno que allí se había alzado el centro del poder político. En época geometría el prestigio de una ciudad se medirá por el tipo de santuario dedicado a su divinidad. Como consecuencia, toda la comunidad intervendrá en el embellecimiento del edificio y en el almacenamiento de riquezas.
·         Santuarios.
En época geométrica lo que se produce es un resurgimiento de los santuarios. Se constata la cristalización de las prácticas religiosas y se va a hacer necesario la construcción de templos que sirvan como residencia de la divinidad. La arquitectura religiosa del periodo geométrico la conocemos a través de terracotas que reproducen templos y que están depositadas en los santuarios y a través de las platas de edificios.
El primer deposito al que nos referimos es al depósito votivo de Perachora, en el golfo de Corinto, datado entre los siglos IX y VIII a.C. Allí se encontró tres templos de terracota donde se reproducir a un templo de planta absidal, o de herradura, en el que la técnica constructiva se intuye a través de la decoración pintada. Así vemos que los edificios están formados por una cimentación de piedra, sobre ella un armazón de madera y adobe enlucido con barro y decoración geométrica. Luego contaría con un tejado curvo y por ultimo con una cubierta de paja.  Contaba con un pórtico con dos postes de madera, precedente de los templos in antis, y una cella.

Otro depósito importante es el del heraion de Argos, en Argólida. En este caso la terracota reproduce un templo de planta rectangular con la misma técnica constructiva que el anterior. Estaría integrado con por un pórtico con dos columnas y en el frente de cubierta plana. Cámara principal a doble vertiente. 
                                    
Otro ejemplo es el templo de Apolo en Dreros en el noroeste de la isla de Creta, fechado entre los siglos VIII y VII a.C. Este un templo in antis con planta rectangular. Está formado por una sola nave de 10’80 x 7’20m, siendo el grosos más o menos de 0’70 m. Ha sido construido con sillares irregulares, siendo diferente de los anteriores. En el centro de la sala se documentado un hogar central que tiene un carácter ritual. Este está flanqueado por dos columnas de madera que sostendrían una techumbre abierta para la salida de humus y entrada de la luz. En el proceso de excavación se documentaron una serie de hornos destinados para sacrificios cruentos, en este caso de cabras, cosa que sabemos gracias al hallazgo de gran número de cornamentas. Se encontraron también unos bancos adosados a la pared en los que se documentaron una serie de exvotos fechados en el siglo VIII realizados en bronce. Estos exvotos se fechan en el VII pero el que hizo la excavación fecho el edificio en el siglo VIII.
        
Otro de los edificios es el templo de Apolo Daphnephoros, ubicado en Eretris, fechado en la primera mitad del siglo VIII a.C. Presenta una planta de herradura con un pórtico sostenido por dos postes con cubierta plana. El estaría integrado por  zócalo de piedra sobre el que se disponen postes de madera vertical distribuidos a distancias regulares en todo su perímetro. Entre poste y poste parece ser que iría una cubierta de paja sobre la que seguramente pudo ir una capa de adobe decorada con motivos geométricos pintados.
Planta del Templo de Apolo de Dreros
El lugar en el que se alza el santuario de Apolo en Thermon, Etolia, estuvo ocupado por construcciones fechadas desde el Heládico antiguo hasta época tardo-helenística. Las construcciones más antiguas que se constatan en este yacimiento se fechan en el Heládico medio y reciente. Estos edificios son de planta rectilínea o en forma de herradura. De estos el de mayor importancia es el mégaron A, identificado con un templo o un palacio. La funcionalidad de este edificio no se sabe con certeza pudiendo tratarse de un templo o un palacio. Para el periodo geométrico (silgo X y IX a.C) es lo que la bibliografía conoce como mégaron B. Este guarda afinidades técnicas con su predecesor en cuanto a su planta, por lo que se llegó a plantear que el que diseño el mégaron B vio en pie el mégaro A y se inspiro en su planta. Este mégaron B presenta tres cámaras y alrededor del edificio se conservan 18 delgadas placas de piedra que debieron de sostener postes de madera.  Constituye así el ejemplo de templo períptero más antiguo. Sin embargo la perístasis no sigue una disposición paralela al edificio, haciendo una ligera curva recordando a la planta del megarón A.

Tenemos también el templo de época arcaica fechado en el 650 a.C dedicado al dios Apolo. Este se realiza con orden dórico y en él se ve por primera vez la utilización de terracota para realizar las antefijas, que rematan las tejas, y las metopas. Las metopas están pintadas por artistas corintios. Se trata de los únicos restos de pintura mural de época arcaica con un carácter monumental. Están decoradas con temas sin relación entre sí, reflejando asuntos míticos como el gorgoneion. Otro de los temas representado es la historia de Quelidón y Aedón, un tema que no volverá a representarse en la arquitectura griega.
Templo de Hera en Samos fechado en el siglo VIII a.C. es también conocido como Hekatompedon , lo que indica que es un templo de cien pies por lo que se hace necesario de una columnata central. El basamento por tanto se desplazó para que la gente pueda ver la escultura de la diosa solo con asomarse. 
·        El territorio.
Del territorio se extraen los medios de vida, principalmente agrícolas. Debe haber una estrecha vinculación entre el territorio y el centro de las polis. Los santuarios extraurbanos garantizaban la relación entre el territorio y la ciudad. La polis griega encierra así dos elementos complementarios indisolublemente ligados: la ciudad propiamente dicha (astu) y su territorio (Chora).
Otro de los elementos que implica la polis es la existencia de un ordenamiento jurídico y leyes o norma, no fijadas por escrito, sino que sólo eran conocidas y aplicadas por los aristoi.
El territorio no ha sido objeto de estudio para los arqueólogos. Debemos tener presente que existían una serie de elementos necesarios y que eran inseparables de la ciudad, como son los pozos, las eras, los hornos, los molinos, las minas, las canalizaciones, los rediles, etc. Las funciones del territorio serán defensivas, religiosas, funerarias y económicas, y sólo la función política será exclusivamente urbana.
·     Características generales de la ciudad.
El espacio de una ciudad se va a dividir en tres áreas diferentes, que según Aristóteles se debe a Hipodamo de Mileto.
Tendríamos el espacio privado que es el ocupado por las viviendas, el espacio público destinado a reuniones de carácter político, al comercio, al teatro, manifestaciones deportivas, etc y por ultimo tendríamos al área sagrada, destinada a los templos de los dioses. Los edificios religiosos sobresalen por encima de todos los edificios restantes y surgen en una posición dominante.  La ciudad tiene un límite de crecimiento, por lo que se recurre a dos soluciones:
§  Crear un organismo equivalente o incluso de mayor tamaña junto a la ciudad primitiva. El núcleo primitivo es el palaiapolis y el nuevo enclave es neapolis.
§  La otra solución es crear una colonia en algún lugar lejano. La ciudad se reproduce en otro lugar mediante el traslado de una parte de ella misma que se “deduce” o se resta al cuerpo originario de la ciudad. 
Resumiendo, la ciudad griega se va a caracterizar por su unidad, que consiste en que en la planificación de Hipodamo no había zonas cerradas o independientes. Se da además una concepción urbana unitaria, ya que se podía circular por todas las zonas de la ciudad de manera libre. La articulación se da en la división en las tres áreas, y se da también un equilibrio con la naturaleza. Respecto a eso Aristóteles señalaba que la ciudad de Hipodamo estaba pensada para un máximo de 10.000 habitantes.


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