La caida de Roma: Los vándalos y el saqueo de Roma

Con la ruptura de la frontera occidental, nuevos protagonistas aparecen en la historia de Roma, una roma en decadencia y protagonista de su propia caída. Entre estos pueblos que participaron en la primera oleada de invasiones, estaban los Vándalos, un pueblo de origen germánico y caracterizado por una estructura militar del Reino. La historia de los Vándalos es interesante, pues junto con los visigodos, fueron capaces de saquear la capital del mundo, Roma y someterla mediante la presión y la piratería, donde un viejo conocido de roma reaparecerá, Cartago. 

Los vandalos en Roma.
Extraido de: http://www.ocesaronada.net/por-que-llamaron-los-musulmanes-al-andalus-a-la-peninsula-iberica/

La gran migración gótica y la nueva presión que supuso la llegada de los gépidos  causaron alteraciones  étnicas en torno a la vieja ruta del ámbar. Dichos cambios fueron protagonizados en lo fundamental por la expansión de las etnias vándalas en dirección sudoriental bajo presión gótica.

Los vándalos, serian junto con godos y burgundios, los protagonistas de la primera de las grandes invasiones de la Pars Occidentalis del imperio. Esta primera oleada se caracterizó por la amplitud de los movimientos migratorios,  que irían desde las orillas del mar negro a la Península Ibérica y el norte de África, dándose además la situación de creación de reinos barbaros en suelo imperial.

La estampida goda creo sobre los pueblos bárbaros y las dificultades militares provocadas por las andanzas de Alarico, terminaron por hacer mella en la tradicional frontera de Rin, que acabó rompiéndose. Podemos distinguir dos grandes grupos,  uno esencialmente Ostrogodo, huyendo de los Hunos, que fue atajado y masacrado por Estilicón. Y otro más variado en cuanto a etnias, entre las que se encontraban nuestros protagonistas de hoy, los vándalos.

Este último grupo, conseguiría traspasar la frontera la navidad del 406. En el 409 la parte principal de estos grupos traspasaba los pirineos, ante una defensa más nominal que efectiva del sus pasos, permitiendo el acceso a la Hispania romana, siendo participes activos de la rebelión contra Constantino III, dirigiéndose e instalándose los vándalos y suevos en la Galecia.

La recuperación de la normalidad, con la derrota de los usurpadores (Constantino III, sus hijos, en el 411, y Jovino en el 413) acabaría posibilitando la solución del problema visigodo, del que ya hemos hablado, mediante la firma del pacto de Foedus. Seguidamente el gobierno imperial decidió solucionar el problema que le había surgido en las provincias hispanas y para ello optó por hacer uso de su nuevo instrumento de guerra, los visigodos.

Bajo el mando de Valia, los visigodos destruirían las monarquías militares de los alanos y desplazaron a los vándalos, los suevos se salvaron temporalmente debido a un rápida reclamación de retorno de Valia por parte de los romanos. No les gustaba la idea de que los visigodos se quedaran con el triunfo de masacrar a los bárbaros.

La caótica situación que siguió a la muerte de Constancio y Honorio, permitió a los vándalos saquear a placer las provincias meridionales y levantinas de Hispania. Pero los visigodos siguieron presionando, forzando al rey vándalo, Genseríco, en el 429, a evacuar y poner sus ojos en la provincia de África, con capital en Cartago; amenazando así una región vital  para el aprovisionamiento  de grano y aceite de Italia y de la propia Roma.

La política defensiva imperial, se había centrado en el bloque europeo, dejando la provincia de África a depender de si misma para su defensa. Con una población dividida por querellas internas de carácter religioso, amplias regiones del interior y de occidente dominadas por jefes bereberes, hacían de esta provincia un caramelo demasiado suculento para un pueblo y un rey en busca de tierras donde asentarse, y no nos mintamos, una provincia rica como era la de África, no hacía sino aumentar este interés.  Concluyendo su conquista por parte de Genseríco, en el 439 con la toma de Cartago.

Reino Vandalo de Africa
Extraido de: https://imperiobizantino.files.wordpress.com/2007/04/africa-reino-vandalo000.jpg

A partir de ahí, se constituiría un estado germánico que no reconocía ninguna autoridad imperial. Diseñó un fuerte plan de presión estableciendo bases navales en las islas baleares y una poderosa flota, capturada a los romanos con la caída de Cartago. Esta estrategia pronto se expandió a la isla de Sicilia.

Con el mar dominado, Genseríco inició una política de presión sobre el gobierno de Ravena, roma ya no era segura desde su saqueo a manos de los visigodos. Esta política consistió en una serie de acciones piraticas sobre costas Italianas provocando un encarecimiento de los envíos de trigo. El plan le salió bien, ya que mediante esta presión  consiguió la mano de la hija del emperador Valentiniano III para su hijo. Tras la muerte de este, y con el pretexto de su asesinato, Genseríco organizo un ataque marítimo con el que llegaría a saquear la ciudad de Roma, otra vez, la ciudad eterna era atacada y saqueada por barbaros germánicos en junio del 455.

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